Disposición del aula
Si estás pensando en iniciar tu propio taller de robótica educativa con el sistema Lego WeDo esta entrada puede serte útil. Como puedes imaginar, hay unas cuantas cosas que se deben considerar antes de empezar. A continuación compartiré mi experiencia personal y las decisiones que tomé teniendo en cuenta las posibilidades de las que disponía.
La primera cuestión a considerar es si Lego WeDo 2.0 es para ti o no. Esto ya lo traté en esta otra entrada, así que supongo que la respuesta es afirmativa.
Uno debe familiarizarse con la herramienta que va a utilizar, así que compré mi primer set para asegurarme de que iba a sentirme cómoda con ella en mis clases. Para ver el set en la tienda amazon puedes hacer clic en la imagen.
Una vez que tenía decidido que esto era con lo que yo quería trabajar, la primera cuestión que yo abordé cuántos niños podría manejar en un grupo, teniendo en cuenta que tendría alumnos a partir de siete años. Se recomienda tener un set de Lego por cada dos estudiantes, aunque algunos talleres trabajan con tres niños por set. En mi opinión tres niños usando un mismo set son demasiados, por lo que decidí que tendría un set por cada dos chavales. Para poder supervisar su trabajo de forma apropiada decidí limitar el número de niños por grupo a 8, así que compré 4 kits.
La elección del dispositivo con el que programaríamos los modelos la expongo en otra entrada.
Para montar mi taller con Lego WeDo 2.0 necesitaba un espacio adecuado en el que profesor y alumnos estuviéramos cómodos. Lo encontré en Pequeños Alquimistas, un lugar en el que mi amiga Almudena organiza talleres, cursos y eventos científicos para niños y adolescentes.
Los elementos con los que cuento allí, que considero indispensables, son dos:
- Una superficie grande sobre la que trabajar. Todos los estudiantes caben alrededor de la mesa y tienen espacio suficiente para construir los modelos y utilizar las tabletas.
- Un espacio vacío en el que probar los modelos en el suelo. Tenemos sitio suficiente para organizar carreras, colocar obstáculos, hacer que los robots luchen unos con otros... o cualquier otra idea que surja. Y no tenemos que preocuparnos de que se nos descalabre alguno de los robots desde las alturas.
Como ya he mencionado, los niños trabajan en parejas. Cada pareja tiene asignado un color, que se corresponde con el de la funda de su tablet y una pequeña pegatina que llevan los smarthubs. Estos a su vez han sido renombrados (puedes ver cómo hacerlo aquí), de manera que cuando los conectan a las tabletas se puede identificar fácilmente cuál es el hub con el que se está trabajando.
Por último tuve que decidir la duración de las sesiones. Cuanto más largas sean más cosas se pueden hacer. Sin embargo algunos de los niños más pequeños se distraen cuando una actividad dura más de una hora. Llegué a una solución intermedia, haciendo las sesiones de 75 minutos y dejando un poco de tiempo adicional tras cada clase para que los niños puedan enseñar a sus padres lo que han hecho.
Hasta aquí lo que creo que son las decisiones fundamentales que hay que tomar al comenzar a impartir un taller de robótica educativa con Lego WeDo 2.0. Espero que esta entrada te haya resultado informativa. No dudes en contactar conmigo si necesitas más detalles sobre este tema.
La primera cuestión a considerar es si Lego WeDo 2.0 es para ti o no. Esto ya lo traté en esta otra entrada, así que supongo que la respuesta es afirmativa.
Uno debe familiarizarse con la herramienta que va a utilizar, así que compré mi primer set para asegurarme de que iba a sentirme cómoda con ella en mis clases. Para ver el set en la tienda amazon puedes hacer clic en la imagen.
La elección del dispositivo con el que programaríamos los modelos la expongo en otra entrada.
Para montar mi taller con Lego WeDo 2.0 necesitaba un espacio adecuado en el que profesor y alumnos estuviéramos cómodos. Lo encontré en Pequeños Alquimistas, un lugar en el que mi amiga Almudena organiza talleres, cursos y eventos científicos para niños y adolescentes.
Los elementos con los que cuento allí, que considero indispensables, son dos:
- Una superficie grande sobre la que trabajar. Todos los estudiantes caben alrededor de la mesa y tienen espacio suficiente para construir los modelos y utilizar las tabletas.
- Un espacio vacío en el que probar los modelos en el suelo. Tenemos sitio suficiente para organizar carreras, colocar obstáculos, hacer que los robots luchen unos con otros... o cualquier otra idea que surja. Y no tenemos que preocuparnos de que se nos descalabre alguno de los robots desde las alturas.
Como ya he mencionado, los niños trabajan en parejas. Cada pareja tiene asignado un color, que se corresponde con el de la funda de su tablet y una pequeña pegatina que llevan los smarthubs. Estos a su vez han sido renombrados (puedes ver cómo hacerlo aquí), de manera que cuando los conectan a las tabletas se puede identificar fácilmente cuál es el hub con el que se está trabajando.
Por último tuve que decidir la duración de las sesiones. Cuanto más largas sean más cosas se pueden hacer. Sin embargo algunos de los niños más pequeños se distraen cuando una actividad dura más de una hora. Llegué a una solución intermedia, haciendo las sesiones de 75 minutos y dejando un poco de tiempo adicional tras cada clase para que los niños puedan enseñar a sus padres lo que han hecho.
Hasta aquí lo que creo que son las decisiones fundamentales que hay que tomar al comenzar a impartir un taller de robótica educativa con Lego WeDo 2.0. Espero que esta entrada te haya resultado informativa. No dudes en contactar conmigo si necesitas más detalles sobre este tema.
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